No es una revolución de calles y gentío.
Nuestra revolución es callada,sumisa y obediente.
Y su único motor no es ni la injusticia ni tampoco la superación personal
Nuestra revolución se basa en el confort,en el bienestar individual y en la sensación de grandeza personal.
Somos revolucionarios de andar por casa y nuestras escopetas disparan hacia la televisión con la parsimonia de un mando a distancia que poco a poco va mostrando como nuestra bestialidad y falta de coherencia se exhibe tras un cristal oscuro y opaco.
Y mientras los años consumen nuestras guerras y nuestras victorias nos quejamos de las bestias que se devoran unas a otras.
Sin saber que somos los únicos animales que llegan a matar por placer aun sabiendo que el placer es el tirano mas fiero.
Las únicas a las que la comodidad les hace reaccionar
Las únicas que no pueden empatizar con el resto de sus congéneres.
Ayer en una revista sobre temas actuales leí un reportaje con un texto hiriente y critico,algo sentimental.
Tenia montones de fotografías con niños famélicos y desnutridos.Algunos que todavía estaban en incubadoras porque acababan de nacer.
Pensé que debe ser horroroso decidir dar a luz un niño obeso y malcriado que vivirá con todas las necesidades cubiertas.
Mientras en otro lado del mundo un pobre ser debe pagar por nuestra mala gestión de recursos humanos y alimenticios.
En la hoja siguiente el reportaje se cortaba y había una extraña entrevista a Charlize Theron.
Rubia,oxigenada y hablando de temas tan banales como un nuevo amor o una operación estética.
¿Como puede el mundo mostrarnos todo el horror,la degradación,el sufrimiento del mundo y luego hablarnos de que una mujer padece depresión por cosas como cortar una relación o operarse de los pechos?
No me lo termino de creer.
No termino de creer que no elijamos la opción difícil,la menos asequible.
Pero a nadie le gusta ver a niños decrépitos muriéndose antes de nacer
Que lamentable.Mejor llenar las hojas haciendo entrevistas a pedantes famosos de pacotilla
Pensé que los padres de aquella rubia trajeada que nos hacia despilfarrar nuestro dinero y nuestro tiempo estarían orgullosos
Un pedazito de su falta de humanidad en el mundo
Pero
¿Y los padres de aquellos niños que morían ya en sus primeras horas de vida?
Sus hijos no serian nada para este mundo.Un trozito de miseria mas que ya no sorprendía.Un equivoco de la naturaleza.Una lagrima barata.
No podrían sentirse orgullosos de sus hijos porque sus hijos no tendrían la posibilidad de deprimirse por una ruptura sentimental o una operación estética.
Su revolución no era la nuestra
Su revolución consistía en superar al día del mañana
En sobrevivir al día siguiente
No en no morir al día siguiente
Cada poro de su cuerpo luchaba
Les faltaba madera de revolucionarios
A nosotros ante cada dificultad cada poro de nuestro cuerpo se resentía
Eramos egoístas con nuestros dramas
Pero es que el egoísmo era un don que nuestra condición social nos había permitido
Podíamos mirar al mundo de vez en cuando con lagrimas en los ojos
Pero al final siempre volvíamos a nuestro mullido sillón con nuestros dramas de sobremesa y nuestros monos de feria bulimicos y mediocres que nos hacían soñar y valorar el placer.
Porque al final el placer era el único motor de nuestra revolución.
Porque al final el placer era lo único que nos importaba