domingo, 20 de octubre de 2013

Soliloquio nocturno I







Las 3 de la mañana es la hora perfecta para poder vomitar pesadillas. La hora en la que los cigarros saben a sueno incompleto y en la que los ancianos buscan al niño que una vez les habito por los callejones sombríos y oscuros.
Tengo ganas de follar y que duela.
Ganas de correrme en todo lo agradable, lo apacible, lo conocido.
Ganas de que el orgasmo sea a la vez soga y bendición.
Tengo ganas de poder transmigrar.
De perderme por un momento en este cosmos que es la vida y legarle a un noctambulo mi existencia con la misma destreza que Houdini.
Me inquieto por poder escapar de esta cárcel que es mi mente y vislumbrar las estrellas de otro firmamento que no sea el de mis sueños.
De huir de toda esta serie de recuerdos, vivencias, personas, y traspasar las barreras de esta ciudad fantasma que  configura mi existencia.
Hoy quiero correrme en todos los te quiero y en todos los te odio que nunca dije y también en los que me reserva el destino.
Quiero que las musas y los demonios devoren mi cuerpo y ensucien mi mente mientras esta pequeña muerte me hace creerme un reputado escapista que puede atravesar montañas, océanos, llamaradas de sentimiento, con un solo parpadeo, con un desvanecimiento, en el crepitar de la saliva, con un suspiro.
Quiero dejarme llevar. Olvidarme de todas las guerras que libran día a día mi pasión y mi odio.
Hacer del rió, sequía.
Beberme el ultimo recuerdo mientras el barman me pide la cuenta y dejarlo para otro día
Mientras la respiración se acompasa y el corazón se oxida.

Soliloquio nocturno





En el fondo de mi corazón , a mis lagrimas solo las acalla mi pluma escribiendo sonetos insomnes y deformes en la madrugada , mientras la cordura se escabulle por las rendijas de la persiana medio aterrada.
Y en el fondo de mi corazón se que ahi que estar muy partida y a la vez muy llena para que una hoja de papel y una pluma te den la fuerza necesaria para conciliar el sueño. Pero se que cuando la noche sucede al día y ya no quedan nubes en las que dibujar ilusiones, un papel y una pluma son los mejores aliados para dejarse llevar por las tinieblas del sueño hacia un nuevo día.
Y aunque deformes e insomnes amo cada letra porque forma parte de la belleza confinada que da sentido al dolor, al placer, a la propia vida.

sábado, 19 de octubre de 2013

El inventor





se marcho de la ciudad con paso firme y sin mirar ni un solo segundo atrás.

El ser humano todavía era una creación inerte.
El inventor la había visto llorar.
Y había intentado calmar sus lagrimas con el abrazo de un ser amable que estuviera dotado de gracia divina.
Los había visto entregarse a los placeres de la carne y vestir con opulencia mientras el hambriento se refugiaba en su patio.
Y había intentado reducir su ansia y aumentar su altruismo.
Había visto como era presa de la envidia, del rencor, como cosechaba en sus manos la sangre de las victimas para transformarla en odio visceral.

El inventor había intentado que la humanidad se revistiera de una capa de pureza.
Y le había creado dioses y demonios para someterlos.

La cultura había sido la manzana que les había revelado el nuevo mundo.

Y cuando los propios pueblerinos que acudían a su consulta llenos de dolor; lo persiguieron extasiados con antorchas no vio otra salida que huir.


Sin embargo sabia que no seria el ultimo.

Que mas inventores llegarían y que el atractivo de la novedad haría a esas criaturas sucumbir ante ellos.

El ser humano era todavía demasiado débil.

Necesitaba que lo guiaran y estaba demasiado cansado como para hallar por si mismo el conocimiento.


Por mas manzanas que probara siempre necesitaría la aprobación ajena para darles un mordisco.


Por mas manzanas que probara el conocimiento era todavía  un fruto demasiado agrio y nefasto para su confortable paladar.



viernes, 18 de octubre de 2013

Esta libre





El animal que me habita ya no necesita de sus cadenas. Tal vez siempre careció de ellas y crecio siendo un ser salvaje y huraño ya desde el primer momento.
Los dioses y los demonios que lo sujetaban solo eran hilos de tela que jugaban a hacer de trapo sus pasos de plomo.
Ahora son ellos los que se someten a su voluntad , compitiendo por yacer en su corazón. Sin saber que todo lo glorioso y lo ruin que este genere sera una obra de ambos.
Que todo lo benévolo y lo dañino que produzca a su paso será una mezcla de su fortaleza.

En este baile de mascaras que es la vida, de cuero están hechos los corazones y de terciopelo las lenguas.
El proyecto humano que exponemos y vendemos al mejor postor solo es un modo de enmascarar y enjaular a la bestia que subyace bajo la cal de nuestras pestañas.
Nos empeñamos en hacerle retratos en sepia donde crea un mundo propio donde  poder habitar por falta de entender la pasión y la rabia como único y sincero dogma.
Por falta de abrirse las venas en canal para dejar marchar el prejuicio con la sangre que lo hereda de generación en generación.


Y mientras algunos dirigen sus pasos en este baile terrenal yo juego a vivir en los tejados y a veces el idioma que empleo para dirigirme a la luna hace que algunos cierren de golpe sus ventanas con pavor.


Lo que mas teme el ser humano es a la verdadera criatura que lo habita y todo lo que pretenda mostrarsela.



El conocimiento es una copa llena de veneno hecho de nuestras propias lagrimas, que nos salva y a la vez nos arrebata la vida para siempre.



Sin embargo no pretendo otra cosa que bebermela hasta perder el sentido.
Hasta llenarme de mi propia inmundicia y también de mi ternura.

Porque se que llevo la marca de Cain sobre la frente.

Y el animal que me habita no necesita  esconderla.


Esta libre.


Y aunque este mundo de cuerdos haya decidido eliminarlo con su falsa conciencia , tiene la osadía de visitar tus pesadillas y mostrarte que son el cielo en el cual quieres perecer.


Esta libre.

Libre para violar la fe, la moral , el dogma, la decencia.

Libre para caminar con su inseparable compañera la locura y fingir que se da una tregua.