sábado, 14 de enero de 2012

Vanidad

Hay un momento de la madrugada donde la luz de la persiana deja entrar pequeños rayos que se proyectan sobre la pared de el techo creando sombras chinescas que desprenden un brillo propio de las estrellas.
Ella solia despertarse de madrugada y quedarse largo rato contemplando el techo
En el techo estaba escrita un tipo de magia que poco a poco ,con el paso de los años se va olvidando

Pero en esos momentos no habia nada mas importante que observar aquel falso cosmos
Entonces podia alargar la mano y rozar uno de esos pequeños focos de luz,cerrar el puño fuertemente y fingir que toda la belleza del mundo estaba en su mano
Que algo puro y autentico se habia colado en su piel y que era su única dueña

Pero una vez abierta la mano toda aquella belleza se esfumaba convirtiéndose en algo inalcanzable
Creo que por eso lo amaba.Porque sabia que nunca lo tendría

Y esa fascinación alimentaba su obstinación ante la desgarradora perspectiva de que el objeto de su idolatría nunca seria suyo
Era un simple capricho

Y un día cuando se dio cuenta de que aquella luz en sus manos se apagaba decidió comenzar a amar otra cosa
Lo novedoso,lo atractivo,lo sugerente y lo innacesible alimentaban su amor
Sin embargo una vez hecho suyo el objeto de su amor pasaba a ser algo aburrido,horrendo,tedioso y nauseabundo

Tal vez fuera porque en el fondo su amor era tan pobre como el de un niño y ostentar a lo mas alto hacia que dejara de pensar en que no tenia nada que ofrecer mas que la vanidad.
Tal vez fuera que creyera que Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza
Y si el nos creo por capricho
¿Por que no crear y destruir en nombre del amor con el mismo voluptuoso capricho?

Al fin y al cabo en nombre del amor se cometen las peores atrocidades de este mundo

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